Time is Up!
Time's up
Prueba
Que WordPress es el CMS más popular del mercado no es ningún secreto, tal y como indican los numerosos estudios y estadísticas elaboradas al respecto. WordPress comenzó siendo una plataforma idónea para el desarrollo de blogs pero, con el tiempo, se ha convertido en un gestor de contenidos (CMS) de amplias posibilidades.
Existe un debate ya antiguo (dentro de la «antigüedad» que pueden tener los debates sobre los CMS) sobre cuál es el gestor de contenidos más potente. No faltan los defensores de Joomla, Drupal u otras alternativas. En mi opinión cada CMS tiene su ámbito de actuación natural. De Joomla me reservo mi opinión, aunque sin negar que no es la opción que más me gusta. Drupal parece una buena elección para proyectos de cierta envergadura aunque, como veremos, WordPress se está convirtiendo una alternativa óptima para una gran cantidad de proyectos de de gama media/alta. Y qué mejor para exponer esta idea que un proyecto que hemos entregado a un cliente en las últimas fechas.
Se trata de la web de Galeno 2.0, una empresa situada en Oviedo dedicada a la consultoría y a la formación y, efectivamente, se ha desarrollado en WordPress. Esta web puede ser un buen ejemplo de la posibilidades de este popular CMS, ya que incluye muchas funcionalidades (solicitadas por el cliente) que van mucho más allá de lo que una visión epidérmica de este gestor de contenidos puede darnos a entender.
Las características de partida de WordPress han mejorado ostensiblemente en los últimos años. La estructura de la información está basada, como siempre, en entradas (post) y en páginas para contenidos estáticos (estáticos a priori). Pero en los últimos años se han multiplicado las web que incluyen campos personalizados (custom fields) y taxonomías personalizadas (custom taxonomies). Desde el momento en que se abre la puerta a la implementación de estas estructuras de datos personalizadas, WordPress nos permite llegar allí donde deseemos. De hecho, la web de Galeno 2.0 incluye funciones «inesperadas» en un CMS tan «básico» para aquellos que lo desconocen:
¿Quién iba a decir hace 10 años (e incluso menos) que se podría construir un sitio web de estas características con WordPress? La respuesta: casi nadie.
Además, WordPress aporta una serie de ventajas innatas más conocidas como:
En definitiva, WordPress puede y debe ser considerado (y de hecho ya lo es en muchos sectores) como una alternativa integral para los proyectos web que requieren la mayoría de las empresas y entidades. Evitemos por tanto caer en prejuicios (cada día menos) extendidos e infundados.
En este artículo me detendré en uno de los aspectos más importantes a la hora de elaborar un Plan de Social Media. Se trata del análisis de situación. Antes de llegar a este paso es evidente que ya habremos dado otros como la definición del objetivos y del target. Tras el análisis de situación habría que encarar la puesta en marcha del plan y su posterior monitorización. Sin embargo, antes de lanzarnos a la implementación de una campaña, debemos hacer un análisis exhaustivo de la situación de nuestra marca, producto o empresa en las redes sociales, pero también de la situación de nuestra competencia y del público objetivo.
Podríamos dividir el análisis de la situación en tres bloques:
Para ello debemos utilizar herramientas de monitorización (como KLOUT, Kred…) u otras que nos permitirá comparar y conocer la evolución de followers o fans en Twitter y Facebook, TwitterCounter (evolución de los followers en Twitter de una cuenta), Tweetreach (el impacto de las publicaciones de una cuenta), etc. Además existen herramientas de pago como SocialBro que nos generan un análisis más profundo e integral de la situación de nuestra marca y de la competencia.
Resaltar también el hecho de que algunas redes sociales como Facebook están incorporando nuevos instrumentos muy útiles como la opción de páginas en observación.
Por otro lado, podemos presentar las conclusiones de nuestro análisis de situación mediante un auténtico clásico del marketing como es el análisis DAFO. El análisis DAFO cuenta con cuatro variables que se pueden clasificar como internas y externas. Son las siguientes:
Por último, aportaremos un consejo que nos permitirá que nuestro Plan de Social Media no parezca un ejercicio literario de mayor o menor enjundia: debemos acompañar las conclusiones de nuestro análisis de documentos que, mediante cifras, nos permitan ilustrar la verdadera situación de nuestra marca, de las tendencias y de la competencia. Para ello nunca está de más la utilización de herramientas como las hojas de cálculo.
Cada día son más los organismos e instituciones de todo tipo que optan por «dar el salto» al e-learning (formación online) a través de un LMS. Un LMS (o Sistema de Gestión del Aprendizaje) no es más que una plataforma web que nos permite administrar todo lo relativo a los contenidos de los cursos, los usuarios, las comunicaciones dentro del aula virtual, las actividades y un largo (y variable) etcétera.
Lógicamente, lo primero que habría que definir son las necesidades específicas que tiene la entidad que quiere implantar una plataforma e-learning. Y es que esas necesidades pueden variar dependiendo el ámbito en el que se quiere implantar la formación online. No es lo mismo un organismo público que una empresa, como no es lo mismo un centro de formación especializado en una materia determinada que una universidad. Los potenciales usuarios de dicha plataforma pueden ser desde el público en general hasta los empleados de una determinada empresa. Y éstos pueden ser pilotos de avión, personas desempleadas o extranjeros que quieren aprender el idioma del país en el que residen. Por tanto, el abanico de posibilidades y/o necesidades es prácticamente infinito.
Estas líneas no pretenden dar una respuesta global, ni siquiera genérica, a una casuística tan inabarcable. Existen muchas plataformas LMS en el mercado, algunas de software propietario como Design2Learn, Blackboard o eCollege. Y también existen plataformas basadas en código abierto como Atutor, .LRN, Dokeos, etc.
Mi experiencia durante los últimos años me ha llevado a trabajar a menudo con un LMS en particular: Moodle. Todo parece indicar que Moodle se ha afianzado como el LMS más popular entre los usuarios de todo el mundo, tal y como muestra esta infografía. Sin entrar en comparaciones y mucho menos en descalificaciones de otras alternativas, sí me gustaría dar algunos argumentos que hacen de Moodle una opción ventajosa a la hora de implementar un LMS. Son estas:
En definitiva, Moodle es una opción idónea de cara a implantar acciones formativas en internet, Estamos ante una herramienta potentísima y adaptada a las nuevas tendencias y posibilidades de la web. Y, además… nos permite ahorrar dinero.
Otro día os hablaré de las herramientas de autor.
El acrónimo SEO (del inglés Search Engine Optimization) está en boca de todo el mundo de un tiempo a esta parte. Clientes/as y alumnos/as me suelen preguntar cuestiones relativas a esta materia y, en muchos casos, han «oído campanas«… bastante remotas. El objetivo de este post es el de aclarar algunos conceptos básicos que ayuden al lector/a a entender qué es el SEO, partiendo de la idea, comúnmente aceptada, de que estamos ante una de las claves para alcanzar el éxito en internet.
Existe una gran cantidad de literatura sobre esta materia, pero comenzaremos con la Wikipedia que define al SEO como:
El proceso de mejorar la visibilidad de un sitio web en los resultados orgánicos de los diferentes buscadores.
Por tanto, el SEO hace referencia a un conjunto de técnicas y procesos aplicados a nuestros sitios web con el fin de mejorar la posición en la que éstos serán mostrados en buscadores como Google. Y no sólo la posición, sino también la calidad de la información mostrada para que ésta ejerza de «gancho» ante nuestro potencial cliente.
Esta mejora en el posicionamiento en los buscadores implica la adquisición de mayores tráficos a nuestra web que pueden derivar en una mayor tasa de conversión (desde suscripciones a servicios de noticias a ventas a través de un ecommerce, pasando por un mayor número de impresiones publicitarias) o en el aumento en el volumen de ventas.
Cabe resaltar otro factor muy importante a la hora de conseguir una mejora en nuestro posicionamiento web: el trabajo de marketing en redes sociales. Éste ya tiene una gran incidencia en el posicionamiento orgánico en buscadores. Por ejemplo, Google ya incluye contenidos de los medios sociales en los resultados de las búsquedas de los usuarios.
Y es que Google cuenta, desde hace años, con un sistema para medir la relevancia de las páginas llamado PageRank al que podríamos añadir un supuesto SocialRank, derivado de los medios sociales. Google desmintió públicamente esta afirmación, pero los hechos demuestran que la presencia en las redes sociales ayuda sustancialmente a mejorar el posicionamiento.
Google acapara más del 95% de las búsquedas en España. Cualquier otro buscador tiene una presencia en el mercado español meramente testimonial (el buscador de Microsoft, Bing alcanza un paupérrimo 1,66%, mientras Yahoo se queda con el 1,03%)
En cualquier caso, detengámonos en una serie de estadísticas que nos ayudarán a entender la importancia de posicionamiento orgánico en los buscadores:
Más allá de los datos, debemos conocer las razones por las que apostar por el posicionamiento orgánico en los buscadores. Estas son algunas de ellas:
En próximos artículos abordaremos las diferencias entre el SEO y el SEM o el funcionamiento y la revisiones del algoritmo de Google.
Hay dos elementos que han resultado fundamentales a la hora de explicar como internet ha alcanzado el nivel de popularidad actual: los navegadores y los estándares web.
Fue en el año 1991 cuando Tim Berners Lee crea la primera página web, con el fin de explicar el funcionamiento de WWW (Word Wide Web). Así, los (escasos) visitantes de dicha página podrían conocer elementos hoy tan cotidianos como el hipertexto o el proceso de creación de nuevas páginas.
Como es sabido, para poder visitar páginas web se necesita un navegador que pueda interpretar los archivos descargados a través de la red de internet, haciendo posible su lectura a los usuarios. Los primeros navegadores se utilizaban en ámbitos universitarios muy reducidos y no estaban sujetos a un estándar que permitiera la extensión de estas tecnologías de forma masiva.
El primer navegador en extenderse fue Mosaic (1992), orientado inicialmente a sistemas Unix. Un año después se desarrolló una versión para Windows. Pero fue Netscape Navigator el primer navegador en alcanzar altas cotas de popularidad, al mejorar sustancialmente el rendimiento repecto a Mosaic.
En 1995 nace Internet Explorer para, poco después, convertirse en el navegador más popular aprovechando su posición hegemónica en el mercado de los Sistemas Operativos (esta práctica ha sido sistemáticamente denunciada como competencia desleal).
En los años sucesivos aparecerían nuevas versiones de Internet Explorer y Netscape Navigator. Este último dejo de actualizarse en 2008, liberando su código fuente y sirviendo de base para el lanzamiento de un navegador de código abierto muy popular hoy en día: Mozilla Firefox.
A lo largo de estos veinte años aparecieron otros navegadores como Safari, Opera o Google Chrome, además de versiones modificadas y orientadas a la distribución de diferentes dispositivos y marcas comerciales.
A día de hoy, Internet Explorer ya no es el navegador más utilizado y su lugar ha sido ocupado por Google Chrome. En este gráfico podemos hacernos una idea del actual estado de las cosas en el (competitivo) mercado de los navegadores web:
Cabe resaltar la revolución que ha supuesto la aparición de dispositivos como los teléfonos con acceso a internet (smartphones) o las tablets. Esto ha obligado a los desarrolladores de navegadores web y, especialmente, a los de sitios web, a adaptarse a esta nueva realidad. Los principales navegadores del mercado han creado versiones orientadas a estos nuevos dispositivos y un buen número de sitios web ya se desarrollan con versiones adaptadas específicas para móviles o tablets. En otros casos se opta por el responsive web design (diseño web adaptativo) en los que una mismo sitio web se visualiza de forma distinta dependiendo el dispositivo con el que se esté visitando.
Pero si tenemos que destacar un agente modernizador a lo largo de estos años, éste sería el consorcio W3C. Según su propia presentación:
El World Wide Web Consortium (W3C) es una comunidad internacional que desarrolla estándares que aseguran el crecimiento de la Web a largo plazo.
El rol del W3C tiene una importancia capital y es que ha sido el encargado de definir un conjunto de prácticas estandarizadas a la hora de crear sitios web. Las recomendaciones de este consorcio hacen posible que los desarrolladores de todo el mundo tengan un patrón a la hora de codificar los sitios web. Este patrón permite que una página web que siga dichas recomendaciones pueda ser visualizada en igualdad de condiciones por cualquier usuario, independientemente del Sistema Operativo o el navegador que utilice.
A continuación se incluyen algunos de los principales estándares web recomendados por W3C:
Existen otros elementos relacionados con los estándares que no dependen directamente de W3C, como el lenguaje Javascript, que nos permite controlar el comportamiento del sitio web ante determinados eventos o interacciones del usuario. En este caso, la estandarización viene de la mano de Ecma International.
En resumen, podríamos decir que los estándares web son un instrumento que nos permite crear contenidos y aplicaciones web independientes de la plataforma (sistema operativo) y el dispositivo, garantizando el acceso a la mayoría de los usuarios de internet y la correcta comunicación entre diferentes aplicaciones. Por ejemplo, hoy en día es posible “empotrar” un vídeo de Youtube en un blog gracias al HTML5.
La oficina española de W3C se encuentra en el parque tecnológico de Gijón.
Cada día son más los organismos y instituciones de tou tipu «qu’arreblaguen» al e-learning (formación online) al traviés d’un LMS. Un LMS (o Sistema de Xestión del Aprendizaxe) nun ye otros qu’una plataforma web cola que vamos poder alministrar tolo relativo a los conteníos de los cursos, los usuarios, les comunicaciones dientro del aula virtual, les actividades y un llargu (y variable) etcétera.
Lóxicamente, lo primero que habría de definir son les necesidaes específiques que tien la entidá que quier implantar una plataforma e-learning. Y ye qu’eses necesidaes pueden variar dependiendo l’ámbitu nel que se quier implantar la formación online. Nun ye lo mesmo un organismu públicu qu’una empresa, como nun ye lo mesmo un centru de formación especializao nuna materia determinada qu’una universidá. Los potenciales veceros de tala plataforma pueden ser dende’l públicu en xeneral hasta los empleaos d’una empresa dala. Y éstos pueden ser pilotos d’avión, persones desempleaes o extranxeros que quieren deprender l’idioma del país nel que residen. Poro, l’abanicu de posibilidaes y/o necesidaes nun tien fin.
Estes llínees nun quieren dar una rempuesta global, nin siquieramente xenérica, a una casuística tan abondosa. Hai munches plataformes LMS nel mercáu, delles de software propietario como Design2Learn, Blackboard o eCollege. Y tamién esisten plataformes basaes en códigu abiertu como Atutor, .LRN, Dokeos, etc.
La mio esperiencia nos últimos años fai que trabaye davezu con un LMS en particular: Moodle. To paez indicar que Moodle se afitose como’l LMS más popular ente los usuarios de tol mundu, como muestra esta infografía. Sin falta entrar en comparances y muncho menos en descalificaciones d’otras alternatives, sí me prestaba dar dellos argumentos que faen de Moodle una opción amañosa a la hora d’implementar un LMS. Son estes:
Poro, Moodle ye una opción mui amañosa a la hora d’implantar acciones formatives n’internet, Tamos énte una ferramienta potentísima y adaptada a les tendencies más nueves y a les posibilidaes de la web. Y, amás… vamos aforrar dineru.
Otru día falamos de las ferramientes d’autor.
Son muchas las herramientas que nos pueden ayudar en nuestro trabajo cotidiano con los social media. Aunque es innegable que nos pueden facilitar mucho el trabajo, no debemos olvidar que la estrategia en cada red social debe ser específica: no podemos desarrollar las mismas acciones en Facebook que en Linkedin, por ejemplo.
En cualquier caso, este con este post haremos un breve repaso a algunas de las principales herramientas a la gestión de comunidades sociales online. Se trata de las más potentes y versátiles en cuanto a las tareas que nos ayudan a desarrollar.
Hootsuite es, probablemente, la herramienta más popular para los Community Manager. Dispone de muchas funciones y herramientas que nos permiten publicar y monitorizar varias redes sociales al mismo tiempo. Su uso es sencillo, basado en una interfaz muy bien diseñada mediante prestañas y columnas que nos permite controlar la actividad y las interacciones de cada medio social en un vistazo.
Por otro lado cuenta con un sistema de programación de publicaciones en las distintas redes sociales así como un servicio de analítica que nos permitirá monitorizar palabras clave, tendencias, acortadores de URLs, etc.
Estas son algunas de sus principales características:
Hootsuite es una aplicación gratuita, aunque algunas de sus funciones más avanzadas sólo se pueden utilizar desde la versión de pago. Hasta no hace mucho tenía una competencia frontal en Tweetdeck, que ahora sólo funciona como herramienta (muy potente) para Twitter.
Buffer es una herramienta gratuita que nos permite programar o secuenciar nuestras publicaciones en las diferentes redes sociales. Cuenta con una legión de defensores dado que se trata de una herramienta de fácil manejo y que se caracteriza por la agilidad de su gestión. Cuenta con una extensión para el navegador Google Chrome que integra un botón con el logotipo de Buffer a la derecha de la barra de dirección. Al pulsar dicho botón podremos compartir la web que tenemos en pantalla en nuestras cuentas o perfiles redes sociales mediante un cuadro emergente.
En cualquier caso, su principal atractivo sigue siendo la programación de publicaciones en base a un calendario semanal. Así, podemos distribuir contenidos en distintas redes sociales y programar su publicación mediante una secuencia predefinida.
SocialBro es, para la mayoría de los profesionales, la herramienta más potente del mercado para monitorizar nuestra comunidad de Twitter.
Entre sus muchas características destacan:
Una de las ventajas más destacadas de Socialbro es la posibilidad de realizar acciones sobre nuestra cuenta de Twitter por lotes. Es decir, podemos seguir, dejar de seguir, agregar a listas… a varios usuarios al mismo tiempo a golpe de clic.
Se trata de una herramienta que, al igual que Socialbro, actúa sobre nuestra cuenta de Twitter. Nos permite realizar un seguimiento sobre nuestros contactos (seguidores y seguidos). Veamos algunas características:
Como casi todas las aplicaciones de este tipo, ManageFlitter cuenta con algunas opciones disponibles sólo en su versión Pro (de pago)
Bit.ly es el acortador de URLs o direcciones web más popular. Se trata de una herramienta fundamental para Twitter, ya que el límite de esta red social en cuanto al número de caracteres de las publicaciones (140) hace que las URLs ocupen buena parte de los caracteres disponibles.
Además bit.ly incorpora un apartado de estadísticas para medir impacto (número de clics) que reciben las urls que genera.